... Y sentí el calor de su boca entre mis labios, cómo suavemente deslizaba su lengua por mi clítoris palpitante, presagiando la llegada a las estrellas.
La presión delicada que ejercía con su nariz, mientras sumergía su lengua en el túnel de la sensación me estremecía.
Se arqueaba mi pelvis hacia arriba y hacia abajo, se nublaban mis pensamientos, recorría mi cuerpo aquella electricidad exquisita.. Y! Y! Me quede expectante porque paró de obrar, en ese desesperante instante de lucidez alcancé a ver su mirada sobre mí, como si desease poseerme nuevamente. El diablo se apoderó de su cuerpo y me empotró bestialmente contra el armario, casi pierdo el equilibrio con aquella intensa penetración, sentí que perdía la noción de las cosas, había caído en un transe de placer. No podía parar tal frenesí.
Entre escandalosos gemidos y carcajadas sentí como me desconectaba de la realidad, sé viraban mis ojos, entra, sale, entra, sale, entra, sale era lo único de lo que era consciente, era lo único que necesitaba.
Por: Daniela Encarnacion
Posdata: Pueden seguir mi cuenta de instagram Daniele.frases , en donde publico frases y escritos de este tipo.
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